LA HORMIGA DESPISTADA
Había una vez una hormiga que, a diferencia de las demás, era muy vaga y despistada. Fíjate si era vaga y despistada que un día no se acordó de su nombre y no tenía ganas de pensar cuál era, pero yo sí que lo sé, se llamaba Ramona, pero solían llamarla Ramona la dormilona. Un día le dijo su novio Ramón: -"Ramona, si no haces un poco de ejercicio y te esfuerzas en hacer algo te dejaré". La hormiga muy decidida se fue por el bosque a dar una vuelta pero como no se acordaba donde vivía, decidió quedarse a vivir en un árbol y con el paso del tiempo, Ramona la dormilona se hizo más fuerte y más lista porque lo que le hacía vaga era la televisión, y como allí no había televisión se puso a trabajar y estudiar.
Fin.
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